DOCTRINA SOCIAL CATOLICA: Opción preferencial por los pobres

“El amor por el hombre y, en primer lugar, por el pobre, y en el que la Iglesia ve a Cristo, se concreta en la promoción de la justicia”.

—San Juan Pablo II, Centesimus Annus, #58 (En el centésimo año)

Jesús vivió una vida de pobreza, desde su humilde lugar de nacimiento a su muerte junto a delincuentes comunes. Vivió entre los pobres; se preocupaba por ellos y enseñó a otros a hacer lo mismo. Trabajando con y para los que eran pobres no era un complemento, o una cosa extra que hacer si había tiempo; para Jesús, era un requisito para obtener la vida eterna.

Debemos preguntarnos: ¿Qué significa la opción preferencial por los pobres en nuestras propias realidades concretas, esenciales y básicas? ¿Quiénes son estos los más pequeños entre nosotros? ¿Cómo los encontramos? ¿Cómo nos aseguramos de seguir buscando los más pobres de los pobres, aquellos en quienes Cristo está siempre presente?

Piensen en su vida diaria. Piensen en las personas con las que se encuentran cada semana, cada día. Piensen en la gente con la que no se encuentran, aquellos que intencionalmente evitan u olvidan que existen. Piensen en las personas que esquivan o cuyos ojos no ven. ¿Son estos los “hermanos más pequeños” de Jesús?